Presentación
Hola!! mi nombre es Lenys Zulay Plaza, portadora de la C.I V- 6498493.
Licenciada en Educación Integral y Especialista en Planificación Y evaluación, laboro para el Ministerio del Poder Popular para la Educación, actualmente cumpliendo la función de Directora (E), en la E.N.B "Manuel Segundo Sánchez", ubicada en la parroquia Maiquetía- El Rincón - Estado Vargas, cursando en estos momentos el doctorado en Ciencias de la Educación, con el Convenio UPEL-CIDEC, con la finalidad de seguir creciendo como persona y profesionalmente, sin más se despide de ustedes.
https://youtu.be/BePKnf-duFM
PERFIL PROFESIONAL.
Gestión escolar y los componentes de la calidad de la educación básica
No
intentaremos definir "gestión escolar". Como todo concepto en
construcción, el de "gestión escolar" se define mas fácilmente por lo
que no es que por lo que es. Sabemos que el concepto de gestión escolar
no es sinónimo de administración escolar, aunque la incluye. Sabemos
también que la organización escolar es, en todo caso, y junto con la
cultura escolar, consecuencia de la gestión.
Entendemos
que la gestión requiere un responsable; que para que la gestión sea
adecuada, dicho responsable debe tener liderazgo, y que dicho liderazgo
debe vincularse con el quehacer central de la escuela, que es formar a
los alumnos. Pero también sabemos que la gestión escolar no reduce a la
función del director, sino que pone ésta en relación con el trabajo
colegiado del personal y con las interrelaciones que se establecen entre
los diferentes actores de la comunidad educativa -incluyendo la
comunidad externa- y de éstos entre sí. Supone cierta intencionalidad y
cierta direccionalidad de los sujetos involucrados. Por eso, gestión
escolar se asocia con la planeación escolar. Así, las interrelaciones
que la escuela establemente favorece, y la forma como procura que se
tomen las decisiones, no son fruto del azar, sino de la intencionalidad
colectiva combinada con las tradiciones históricas y la cultura que esa
colectividad ha venido construyendo.
Como hemos señalado
en otras ocasiones , la calidad de la educación básica consta de al
menos cuatro componentes: el de relevancia, el de eficacia, el de
equidad y el de eficiencia. ¿Cómo se relaciona la gestión escolar con
cada uno de ellos?
a) La Relevancia de EducaciónUna educación básica, para ser de calidad, debe ser relevante. Ahora bien, la relevancia se refiere:
• La que se refiere a la relevancia para el niño que es hoy, y la que tiene que ver con la relevancia para el adolescente y el adulto que será mañana.
Una educación de calidad debe poder ser relevante a la etapa de desarrollo, las necesidades y los intereses del niño que desde hoy es persona. De la misma manera, un sistema educativo de calidad debe mostrar una preocupación por identificar escenarios de futuro que permitan imaginar los requerimientos y exigencias que el medio le impondrá cuando este niño llegue a niveles superiores del sistema educativo y/o mercado de trabajo.
• Una escuela de calidad debe poder dar respuesta a los necesidades individuales y a las sociales. De manera muy especial, una escuela construyendo una sociedad en la que la democracia, además de constituir una forma de gobierno, se convierta en una forma de vida.
Entendemos relevancia en sentido amplio. Como consecuencia de una educación básica relevante, un niño o una niña debe poder sobrevivir, entender el entorno y enfrentarse a la vida en cualquier punto del planteo. Por ello, lo más relevante en la educación básica son los habilidades fundamentales: para comunicarse oralmente y por escrito; para analizar y sintetizar y para colaborar en la solución de problemas.
Una educación relevante no puede comenzar siéndolo si no parte del conocimiento y de la valoración del contexto específico en el que se encuentra inserta la escuela. Esto sólo puede hacerlo cada escuela, no puede hacerse adecuadamente desde ningún nivel central.
b) La eficaciaEste
segundo componente del concepto de calidad de la educación se define
como la capacidad de un sistema educativo básico de lograr los objetivos
(relevantes) con la totalidad de los alumnos que teóricamente deben
cursar el nivel, y en el tiempo previsto para ello. Como puede
observarse, este concepto incluye el de cobertura, el de permanencia, el
de promoción y el de aprendizaje real.
c) La equidad
No es posible lograr plena eficacia sin equidad. Un sistema de educación básica, para ser de calidad, debe partir del reconocimiento de que diferentes tipos de alumnos acceden a la educación con diferentes puntos de partida. Por ello, se propone ofrecer apoyos diferenciales a fin de asegurar que los objetivos de la educación se logren, de manera equiparable, para todos. La equidad implica dar más, apoyar más, a los que más lo necesitan.
Todo ello hace referencia a la gestión escolar. Se requiere un proceso de planeación que permita diagnosticar y definir lo que hay que hacer para aumentar la cobertura y abatir los índices de deserción y reprobación, así como para mejorar los resultados de aprendizaje. Es evidente que ello requiere una coordinación, y que todos los docentes tienen un indispensable papel a cumplir en el proceso. El logro de objetivos como los anteriores, por otra parte, difícilmente podrá alcanzarse sin una vinculación estrecha de la escuela con la comunidad y con los padres de familia, y sin el logro de niveles altos de colaboración.
Interesante también es observar que objetivos de esta naturaleza se tienen que perseguir y monitorear a lo largo de todo el año. Para prevenir la reprobación, por ejemplo, es indispensable que se reconozca el proceso de construcción del rezago escolar progresivo, y que se esté atento, diariamente y en cada salón de clases, a sus manifestaciones a fin de brindar la atención individualizada que permite evitar que dicho rezago se convierta en un proceso difícilmente reversible tendiente a la reprobación.
Cuando una escuela se propone mejorar sus índices de cobertura, permanencia, promoción y aprendizaje, el sistema debe ofrecer los apoyos que ésta necesita para lograrlo adecuadamente. Por ejemplo, el sistema podría actualizar a sus docentes para que puedan conducir el trabajo en aula de manera que puedan destinar tiempo a trabajo individual con sus alumnos.
d) La eficienciaLa
eficiencia se refiere al logro de resultados con uso óptimo de los
recursos. Se ubica en el último lugar en el listado de componentes
porque históricamente este es el que ha recibido mayor atención y ha
sido objetivo de continuo monitoreo. Interesa decir que, en la medida en
que un sistema educativo logre abatir los índices de deserción y de
reprobación, estará también aumentando su eficiencia, pues estará
evitando el desperdicio y liberando los espacios ocupados por quienes
debieran yo encontrarse en otro grado de nivel educativo. Eliminar la
reprobación representaría para estos sistemas un considerable ahorro. Y
su solución se encuentra fundamentalmente a partir del quehacer de cada
escuela .
Cabe, no obstante, una clara palabra de advertencia. La escuela pública requiere del subsidio del Estado. No es posible, en aras de la eficiencia, trasladar los gastos de la educación pública a la comunidad. Ello resultaría claramente injusto, pues el sistema tiende a hacer pagar más a quienes menos tienen .
En síntesis, hemos descubierto la importante presencia de la gestión escolar en los cuatro componentes aquí considerados del concepto de calidad de la educación. Gestión como planeación, como liderazgo, como trabajo colegiado; como la distribución y la petición de cuentas de responsabilidades por la calidad a cada miembro del personal escolar; gestión como estrecha vinculación y colaboración con padres de familia y comunidad; gestión como preocupación central por los aprendizajes y su relevancia; gestión como evaluación retroalimentadora permanente.
Cabe, no obstante, una clara palabra de advertencia. La escuela pública requiere del subsidio del Estado. No es posible, en aras de la eficiencia, trasladar los gastos de la educación pública a la comunidad. Ello resultaría claramente injusto, pues el sistema tiende a hacer pagar más a quienes menos tienen .
En síntesis, hemos descubierto la importante presencia de la gestión escolar en los cuatro componentes aquí considerados del concepto de calidad de la educación. Gestión como planeación, como liderazgo, como trabajo colegiado; como la distribución y la petición de cuentas de responsabilidades por la calidad a cada miembro del personal escolar; gestión como estrecha vinculación y colaboración con padres de familia y comunidad; gestión como preocupación central por los aprendizajes y su relevancia; gestión como evaluación retroalimentadora permanente.
La gestión escolar los correlatos de la calidad de los aprendizajesComo ya indicábamos, la vinculación entre calidad de la educación y gestión escolar se ha visto muy reforzada por la creciente investigación sobre escuelas efectivas. Dichos estudios, de naturaleza cuantitativa, han permitido hacer agrupaciones a partir de múltiples datos de carácter empírico sobre las variables que consistentemente se encuentran correlacionadas con el aprendizaje—de carácter casi siempre cognitivo- de los alumnos en escuelas de nivel básico. Estos estudios empíricos acerca de los factores que se correlacionan con niveles muy altos de rendimiento escolar de escuelas en las que la mayoría de los alumnos proceden de sectores populares se han realizado fundamentalmente en escuelas anglosajonas. Estos estudios han sido objeto de un inusitado número de meta-análisis que pretenden encontrar las variables que con mayor fuerza y consistencia se vinculan con la calidad de los aprendizajes de los alumnos. Cada uno de estos meta-análisis termina agrupando las variables de diversos maneras. Propongo que tomemos uno de estos meta-analisis (el más reciente que conozco) , que privilegia a los estudios británicos pero que toma en cuenta otros resultados globales, y que a partir de éste añadamos algunos elementos que nos parece completan la visión desde otras lecturas.
Entre las
variables que se asocian de manera sistemática con el mayor aprendizaje
de alumnos en escuelas que atienden a sectores desfavorecidos
encontramos los siguientes:
a) Liderazgo profesional
Esta variable agrupa los siguientes: el liderazgo debe ser firme y con un sentido claro; el enfoque del liderazgo debe ser participativo; el liderazgo debe ser académico, es decir, el líder tiene que ser un educador, tiene que saber lo que ocurre en los aulas, tiene que estar al tanto de los apoyos que requieren los docentes.
Esta variable agrupa los siguientes: el liderazgo debe ser firme y con un sentido claro; el enfoque del liderazgo debe ser participativo; el liderazgo debe ser académico, es decir, el líder tiene que ser un educador, tiene que saber lo que ocurre en los aulas, tiene que estar al tanto de los apoyos que requieren los docentes.
b) Visión y metas compartidas
El equipo de trabajo, y también los alumnos, comparten una visión de lo que quieren lograr, para lo cual sistematizan un conjunto de prácticos que llevan a cabo de manera consistente..
El equipo de trabajo, y también los alumnos, comparten una visión de lo que quieren lograr, para lo cual sistematizan un conjunto de prácticos que llevan a cabo de manera consistente..
c) Un ambiente de aprendizajeLas
escuelas que tienen buenos resultados de aprendizaje entre sus alumnos
de clases populares generalmente cuentan con un ambiente ordenado y
académicamente más agradable y atractivo. Lo contrario parece también
ser cierto: en una escuela en la que es difícil prever lo que va a
ocurrir, en la que el ruido alcanza niveles incontrolables, donde la
indisciplina irrumpe en el quehacer académico
d) El centro de la actividad escolar está en los procesos de enseñanza y aprendizaje.
La escuela toda, en su operar cotidiano, privilegia estos procesos. Así en una escuela efectiva se respeta el tiempo destinado a la enseñanza. El logro académico moviliza las actividades de maestros y alumnos, y su mejoramiento se convierte en meta de ambos, y el énfasis de la escuela se encuentra en lo académico por encimo de lo cultural, lo socioafectivo o lo deportivo.
La escuela toda, en su operar cotidiano, privilegia estos procesos. Así en una escuela efectiva se respeta el tiempo destinado a la enseñanza. El logro académico moviliza las actividades de maestros y alumnos, y su mejoramiento se convierte en meta de ambos, y el énfasis de la escuela se encuentra en lo académico por encimo de lo cultural, lo socioafectivo o lo deportivo.
e) Enseñanza con propósitos claros.
Los maestros saben a dónde van con su enseñanza. Planean el día, la semana, el mes. Se organizan de manera eficiente para cubrir las actividades previstas. Las lecciones están estructuradas y el proceso y los objetivos son claros para los alumnos, él currículum oficial se adapta a las características de los alumnos
Los maestros saben a dónde van con su enseñanza. Planean el día, la semana, el mes. Se organizan de manera eficiente para cubrir las actividades previstas. Las lecciones están estructuradas y el proceso y los objetivos son claros para los alumnos, él currículum oficial se adapta a las características de los alumnos
f) Altas expectativas.Quizá
de todas las variables, esta es la que con mayor consistencia aparece
como importante en prácticamente todos los estudios que la incluyen.
Tiene que ver con el hecho de que el director cree en su personal, de
que los maestros creen en sus alumnos, y con estas altas expectativas
que se tienen respecto a los logros potenciales se comuniquen de manera
efectiva. Vinculado a las altas expectativas añadiríamos la necesoria
valoración de la cultura de la comunidad por parte del personal de la
escuela.
g) Refuerzo positivo
Muy vinculado con lo anterior se encuentra la presencia, en las escuelas efectivas, de prácticos consistentes de retroalimentación positiva a los alumnos de parte de los maestros y a los maestros de parte del director. En el caso de los alumnos, se habla de los ventajas de una disciplina clara y justa, basado mucho más en la pertenencia y la participación que en los reglas y controles.
Muy vinculado con lo anterior se encuentra la presencia, en las escuelas efectivas, de prácticos consistentes de retroalimentación positiva a los alumnos de parte de los maestros y a los maestros de parte del director. En el caso de los alumnos, se habla de los ventajas de una disciplina clara y justa, basado mucho más en la pertenencia y la participación que en los reglas y controles.
h) Monitoreo de los avancesLa
capacidad de una escuela de dar cuenta con relativa objetividad del
avance de los alumnos, de los maestros y de la escuela como un todo se
encuentra claramente vinculada a su efectividad medida en términos de
logro de aprendizaje entre sus alumnos. Dicho monitoreo supone
planeación. También supone la existencia de reuniones periódicas del
personal de la escuela. Ahora bien, es importante señalar que no basta
con monitorear si los resultados de dicho monitoreo no se incorporen a
los procesos de toma de decisiones.
i) Participación de los alumnosEste
conglomerado de variables incluye aspectos tales como la promoción de
la autoestima entre los alumnos, la que a su vez depende mucho de una
relación cálida y respetuosa de los maestros con los alumnos. Incluye
también el otorgamiento de muchas oportunidades de participación por
parte de los alumnos en posiciones y actividades que supongan
responsabilidad. El alumno debe asumir el control de su propio trabajo
en una actividad por día, según indican. No está por demás señalar que
hay niveles de participación, que en la escuela se manifiestan desde la
posibilidad de alzar la mano para hacer una pregunta hasta la
posibilidad de construir el propio aprendizaje.
j) Relación con la familiaJunto
con la variable "altas expectativas", esta es la que más
consistentemente se relaciona con altos niveles de aprendizaje. Dicha
relación se da de múltiples maneras, desde que los padres entiendan la
importancia de enviar a sus hijos regularmente a la escuela, hasta que
asuman algunas responsabilidades de carácter educativo al interior de la
misma. Lo importante, sin embargo, parece ser que escuela y familia se
vuelvan aliados
k) Una organización de aprendizajeLa
escuela es una organización en la que todos siguen aprendiendo,
incluyendo a los docentes y a los directivos. Se señala también que es
cuando este aprendizaje se da en la escuela misma, y en función de lo
que sus miembros necesitan para lograr mejores niveles de aprendizajes
de sus alumnos -y en ese sentido se habla de una organización de
aprendizaje- que la superación del personal se traduce en mayor
aprendizaje de los alumnos. Nos parece necesario hacer un añadido más,
que conformaría otro conglomerado de variables que, al menos en el caso
de nuestros escuelas, resulta de especial importancia. Se refiere al
dominio que el maestro tiene de la materia que enseña , y también el
manejo que tiene de técnicos efectivos dé enseñanza. Entre éstos últimos
cabe destacar: la diversificación de las actividades de aprendizaje, el
abierto estímulo a la participación del alumno, el recurso al trabajo
en equipo y la obtención individual a los alumnos rezagados, el recurso a
operaciones superiores de pensamiento (análisis, síntesis, desarrollo
del juicio crítico), y el recurso frecuente a la escritura creativa.
Pero
procedamos a hacer un somero análisis de la relación entre la calidad
de la educación y la gestión escolar a partir de estos correlatos con
resultados de aprendizaje.
En primer lugar debemos
observar que en los variables anteriores algunos se refieren
directamente o la gestión y otros, los más son variables propiamente
educativos. Las primeros implican decisiones y acciones promovidos,
estimulados y quizás también organizados por el director de la escuela.
Las segundas, en cambio, pueden ser vistos como ejecutados por el
personal docente.
Pero en segundo lugar debemos
advertir sobre los posibles peligros de interpretar inadecuadamente
estudios como los que acabamos de reseñar. Para empezar que los que
estos variables encuentran con correlaciones, que en ningún caso se
puede hablar de relaciones causa-efecto, y que no contamos aun con un
esfuerzo de conceptualización teórico que nos indique por qué son estas
las variables que se asocian con la calidad educativa.
Estos
estudios nos indican qué variables se correlacionan con el aprendizaje,
pero no nos dicen cómo alcanzar esta relación. De hecho, si intentamos
poner todas estas variables juntas en una escuela pobre, difícilmente
lograremos mejorar la calidad. Los resultados, por tanto, no son una
receta a seguir para lograr calidad educativa en una escuela. Son sólo
indicaciones muy claras que, al irse construyendo en una escuela, en
interrelación con su comunidad, van estableciendo los condiciones para
el logro de resultados excepcionales y, a la vez, cada vez mejores, de
aprendizaje. Cada escuela es única: tiene su historia y sus tradiciones ,
sobe lo que le funciona y lo que le estorba. Y es adentro de este
contexto que deberán irse construyendo los condiciones para revertir los
determinismo procedentes del contexto.
Reflexiones finalesFuera
ya del análisis del la relación entre la gestión escolar y los
correlatos de la "efectividad" escolar, me parece importante reflexionar
con ustedes acerca de la importancia de evitar los tendencias
pendulares que tanto daño nos han hecho en materia de política
educativa. Esta reacción pendular es peligrosa y, en todo caso, se basa
en premisas falsas. Es peligrosa porque alimenta una noción de Estado
adelgazado que a comunidades cada vez más locales, y al hacerlo,
privatiza lo que debe ser público. Sostengo que se basa en premisas
falsas por dos razones. La primera es porque la calidad educativa sigue
siendo un fenómeno complejo y multideterminado, por lo que cualquier
esfuerzo por afectar una de sus causas será, por lo mismo,
necesariamente parcial. Esta es una advertencia para no caer en el
simplismo de que la aplicación de medidos de buena gestión escolar
resolverá el problema de la calidad educativa. La segunda razón por la
cual señalo que se basa en premisas falsas es que los escuelas que han
logrado, en circunstancias desventajosas, altos resultados de
aprendizaje entre la gran mayoría de sus alumnos, son claramente la
excepción y no la regla, lo que hemos analizado en la segunda porte de
esta charla son los variables que explican la excepción.
Si
lo que buscamos es hacer que estas escuelas dejen de ser excepcionales y
se conviertan en norma, necesitamos una política educativa vigorosa,
innovadora, salida, cercana a la escuela, evaluadora, que pida cuentas
pero que brinde apoyos. Como lo adelantamos en la primera parte de esta
charla, para que la gestión escolar se vincule con la calidad educativa
requiere de un sistema educativo que modifique cualitativamente sus
formas tradicionales de vincularse con la escuela y comience a centrarse
en servirla.
TRABAJO EN LA INSTITUCIÓN CON LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS
DURANTE EL TRABAJO DESEMPEÑADO CON LA GESTIÓN ESCOLAR, PUDE ORIENTAR Y FACILITAR CONOCIMIENTOS, SEGÚN MI EXPERIENCIA, DE IGUAL MODO CONSTRUIR EL TRABAJO EN EQUIPO CON TODO EL COLECTIVO INSTITUCIONAL,SEGUIDAMENTE REALIZAR LA ARTICULACIÓN CON LA TRIADA, MEJORAR Y LOGRAR LAS SOLUCIONES DEL PEIC EDUCATIVO DE LA INSTITUCIÓN. ASÍ MISMO, CONSTRIBUIR CON UNA MEJOR CONVIVENCIA COLECTIVA, CON UNA COMUNICACIÓN AFECTIVA Y EFICAZ, DONDE SE APLIQUE LA IGUALDAD DE CONDICIONES Y OPRTUNIDADES, ATRAVES DE LA PEDAGOGÍA DEL AMOR, EJEMPLO Y LA CURIOSIDAD.